Iglesia de los Santos Felipe y Santiago

Está situada en la zona del Tono, más precisamente ‘Ngònia (esquina – ensenada) puesto que se sitúa a los pies del relieve del promontorio. Se remonta a 1686 como una construcción noble construida en sustitución de un templo más antiguo que data de principios del 1400. Como lo atestigua la lápida colocada en la entrada, fue restaurada en 1823 por sus propietarios, el marqués Tommaso Mariano D’Amico y Domenico Calapaj. De formas muy simples, la iglesia tiene una sola nave con ábside semicircular.

El culto original ha sido sustituido por la devoción a la Virgen de Tindari, cuya estatua policromada se conserva, mientras que la antigua pintura de los SS. Felipe y Santiago que adornaba el altar fue robado en la segunda posguerra.